Podía haberte echado en cara todos los errores que cometiste. Podía haberte gritado lo que realmente pienso. Podía haber abierto la puerta y, simplemente, haber desaparecido. Podía haber hecho muchas cosas que no hice y me arrepiento de no hacerlas en ese momento. Y sin embargo, fuiste tú el que se fue, me culpaste de todo y me humillaste. Fuiste tú el que no creyó en un nosotros.



Comentarios

Entradas populares